domingo, 15 de abril de 2007

Habitus

Pao: Juguemos Simón dice!
Papá: Bueno, juguemos Simón dice!
Madre: juguemos Simón dice!
Chama: Juguemos Simón dice!
Yo: (quitando audífonos de mis orejas) Simón dice que pues!
.-.-.-.-.-.
Bueno, les cuento que me encuentro tratando de descifrar y de encajar en un habitus diferente. Esto debido a que ando metida en una situación de la cual todos ustedes se enterarán a su debido tiempo. Por el momento, debo estar en posición reggaetonera: "Así shh, shh...nadie lo sabrá". Aunque debo decir, hay algunas personas que ya lo saben.
De cualquier manera, se me está haciendo un poco difícil. Demostrar capacidad de liderazgo en un ámbito lleno de líderes, o de al menos gente con muchas opiniones y nada de pánico escénico. Además, fallar en esto, consistiría en un error extremadamente público y; debido a la naturaleza de mi responsabilidad, mucho de eso sería mi culpa. Así que compañeros, deseenme suerte.
Aparte de esa situación, debo confesar que la Semana de Ciencias Sociales me tiene bastante preocupada. Lamentablemente mi tiempo libre se está volviendo más y más reducido a cada minuto, y se debe perfilar una personalidad fuerte por parte de la Católica para la organización...en ya. Sin embargo, el equipo de trabajo es tan bueno, que va a salir extremadamente bien de cualquier manera.
Mis estudios se han apilado uno encima de otro, todos con la marca de urgente a su lado. Simplemente esto del medio semestre está resultando una matanza (como lo describió una de mis compañeras). A pesar de eso, tengo fe en que se logrará hacer todo lo que se tiene que hacer (el cómo específico se me escapa, pero siempre me pasa lo mismo).
Finalmente, en noticias sociales no tengo ninguna. Desde hace tiempos que no salgo a farrear, situación que me tiene de mal humor. Además de eso, las salidas a tomar café, almorzar y afines han sido reducidas al extremo (es más, la ingestión de un almuerzo que se merezca ser llamado almuerzo es casi nula).
Interacción con mis amigas, amigos, no-novio y demás allegados también ha sufrido debido a las varias ocupaciones a las que me encuentro comprometida. Guacamayo ha hecho su triunfal regreso al país, y por mismas razones de tiempo no he podido verlo; ni siquiera he podido tener intenciones de hacerlo.
Plan estratégico de la semana:
- Terminar los dos ensayos de Seminario de Teoría Etnológica.
- Terminar de corregir la primera parte de mi informe de taller y comenzar con lo de las categorías teóricas (entre hoy y mañana).
- Asistir a reuniones varias que se van perfilando desde la anterior semana (mínimo son dos y ahora que me acuerdo, mínimo son tres).
- Entregar ese trabajo para el cual conseguí una prórroga (debido a circunstancias especiales de fondo).
- Analizar la Matrix desde el postmodernismo para Seminario de Teoría Etnológica (aunque preferiría seguir viendo a esa película desde mi punto de vista y no tener que analizarla así tan groseramente).
- Recordar comer.
- Hacer tiempo para poder hablar con el muchacho ese y con el otro muchacho ese.
- Farrear el fin de semana.
- Bajar todas las canciones del nuevo CD de NIN "Year Zero" que será lanzado el 17 de Abril.
- Tomar un café con la Chof para chismosear y discutir de asuntos más serios.
- Evitar matar al idiota que tiene los dos Seminarios conmigo.
La próxima semana les comentaré cuanto de esto alcancé a hacer.
dani

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Es el ritmo usual de Antropología, siempre fue así y tiene la ventaja de que cuando estudias un postgrado te das cuenta de que lo que otros llaman estudiar a lo bestia es solo una semana normal en nuestro Departamento. Ahí le agradeces al Marcelito las neurosis... (a mi me pasó en Madrid)
S. Páez

sofia dijo...

bueno mi guambra, asi es la vida, pero yo se que vas a poder con todo y en bien...no en mal como esa tal chof...que por cierto te agradece inmensamente que incluyas en tus tareas el cafesito que ya hace falta...

besitos

Pam dijo...

1- de gana no acolaste en el simon dice estuvo demente!
2- es "Asi QUE shh shh nadie lo sabrá"
3- Te amo
4- Vamos ahi ñañinga que ya mismo farriamos